Uno de los padecimientos que más remedios ha generado, es el dolor reumático. El hombre ha buscado y encontrado docenas de recetas que van desde rodear con un collarín de cobre la articulación adolorida, hasta untarse marihuana o peyote en alcohol.
Pero por tierras de Sonora, donde existen los más efectivos y misteriosos chamanes, se hablaba de una cura efectiva para tan molesto mal. Uno de mis cuñados, le trajo a mi suegro, don Margarito Arredondo, el remedio a su reuma: era un frasco con un líquido pesado con muchos ajos flotando en su interior.
Mi suegro se aplicó en las rodillas frotándose con aquel líquido, y los dolores que lo atormentan en el invierno, desaparecieron. Mi cuñado también se había curado de sus molestias artríticas y lleno de curiosidad, llevó el frasco a un químico amigo suyo, pidiéndole que analizara el contenido milagroso y en unos días la noticia lo sorprendió:
_Solo es aceite de trasformador con mucho ajo…
¿Qué les parece…? Nuestros chamanes se adelantaron a la ciencia y le encontraron otras propiedades al aceite de trasformador combinado con ajo…
Tal vez usted padezca de reumatismo o artritis; si es así, como no estamos en Sonora, desde este programa le aconsejamos: mejor… consulte a su médico.
Norestense fue desarrollado en Drupal